PRIMER SEMESTRE DEL CAMBIO

Al gran fallo de la Comisión Interamericana de Derechos Humano contra el Estado colombiano por el caso de la Unión Patriótica y el Partido Comunista en el que más de 3.000 de sus dirigentes y seguidores fueron asesinados sistemáticamente delante de todos nosotros: «Si hay un detenido por esa masacre graneada, no hay dos” (Alfredo Molano). Pero «no muere el hombre si su muerte vive» (Lucano)... Y al 2° exalcalde de izquierda de Bogotá Samuel Moreno Rojas (2008-2011), nieto de un expresidente, hijo de una excandidata presidencial y un senador, quien tenía todo para conquistar el poder presidencial, pero triste y abruptamente terminó su vida a los 62 años como protagonista de escándalos de corrupción: “Una enseñanza a las izquierdas sobre los caminos que jamás debe emprender una alternativa política.» (Gustavo Petro)

¡Amables lectores multicreyentes, sentipensantes y librepensadores!, en medio de un río pacífico callejero que apoya el humano cambio radical y de un arroyo turbulento que choca contra él y en medio de tanto calor y tantos temas que prenden la vida; y tras seis meses de aciertos y desaciertos -pero sobre todo de aciertos- del Gobierno de Gustavo Petro y Francia Márquez, quienes llegaron al poder con una sociedad ansiosa de reformas al unirse las fuerzas positivas del universo y al alinearse los astros prodigiosos para que estos líderes valientes e inteligentes y grandes seres humanos llegaran a la presidencia y vicepresidencia, he aquí un balance del primer semestre y las perspectivas de su histórico mandato progresista que va hasta 2026.

El “tire y afloje” de este semestre que lleva el Gobierno nacional con sus propuestas de reformas radicales ha sido constante: paz total, laboral, de la salud, pensional, de la justicia, agraria, tributaria y otras cuantas que salen a diario en las noticias -alimentadas además por los tuits que constantemente envía Petro- son convenientes desarrollar para modernizar el Estado y ante todo garantizar que éstas y otras que se adelanten tengan sostenibilidad en el tiempo de este país atiborrado de problemas. Uno de ellos, básico, consiste en “la falta de control del Estado en alrededor de la mitad de su territorio, lo que impide —según Max Weber— tener un Estado moderno. Tal carencia de control explica, en principio, buena parte de los problemas más visibles del país.” (Leal, 2023)

La diversidad de violencias, el incremento del clientelismo político, el marginamiento de gran parte de la población en edad laboral, la concentración de capital, la diversificación de grupos criminales -varios en connivencia con funcionarios públicos, como gobernadores, diputados, alcaldes y concejales- son fenómenos también destacados. “La autonomía regional, facilitada por sus diferencias geográficas y biológicas, y sus deficiencias en la comunicación entre regiones explican en buena parte este fenómeno, pues debilitan el poder central del Estado al impedir un control nacional efectivo…” (Ibíd) Además, la tasa de homicidios de Colombia “es cercana a 26 por 100.000 habitantes, mientras en Europa es 3 por 100.000 habitantes y en el violento Estados Unidos es 7 por 100.000 habitantes. También tenemos tasas de feminicidios muy altas y el crimen organizado y el narcotráfico asolan al país desde hace 40 años.” (Kalmanovitz) 

“Hemos sabido devastar la naturaleza en forma sistemática por poderes regionales sin cortapisas, y no solo por ellos sino también por millones de colonos desplazados de los centros más poblados del país.” (Ibíd) Asimismo ha habido dos partidos tradicionales corruptos e indolentes que nos condujeron de un día para otro a mirarnos entre nosotros mismos como enemigos y nos obligaron a enfrentarnos en aquellas “épocas de los cortes de franela, sofisticados en su máxima crueldad, jamás practicados en ningún país del planeta; de la excomunión católica de los liberales, su condenación eterna e inicio de la corrupción que ahora nos ahoga y que terminó extinguiendo” (Mera, 2023) algunas instituciones estatales, que colapsaron una a una “como castillos de naipes al no resistir el peso de la carga burocrática que aumentaba cada cuatrienio.” (Ibíd) Y como último está el “resultado directo del desgaste de tantos años de gobierno uribista, caracterizado por… fiscales de bolsillo y pésimos resultados sociales, empezando con el 70 % del país que es pobre o ronda la pobreza.” (Botero, 2023) De ahí que las castas del bipartidismo tradicional, el feudalismo, el fundamentalismo, el militarismo, el uribismo y las mafias descarten por subversivos o por utópicos a todo que huela a alternativo o democrático.

Frente a esta realidad escabrosa del presente abrumador, se ubican las reformas radicales mencionadas y la participación masiva de la ciudadanía propositiva. Por eso, el pasado martes 14 de febrero tuvo lugar la gran movilización nacional de respaldo a los cambios que convocó la dupla Petro-Márquez, atendida alegre y pacíficamente en las calles y plazas nacionales para que volvieran a ser epicentro del poder popular: “Colombia eligió un cambio y no será de mentira”, dijo el jefe de Estado en el balcón del Palacio de Nariño al pueblo extasiado por su buena oratoria en una asamblea política en su Plaza de Armas, demostrando una vez más que él es un animal político de la ágora pública obsesionado “por reivindicar a un pueblo ninguneado, desterrado y exterminado desde que el país se llama Colombia.” (Silva, 2023B) Ahí noté “un llamado a no resignarnos a un Estado que delegue la suerte de su gente y se lave las manos sin piedad.” (Ibíd)

Por Chócolo, Bogotà, feb 13/23 en https://www.elespectador.com/opinion/caricaturistas/chocolo/chocolo-135/

Aunque se mantienen las mayorías parlamentarias y no hay en el horizonte amenazas serias a su gobernabilidad, esta clase de convocatorias cuando van seis meses del mandato es para mantener vivo el poder popular. Por eso, hay que entender esa convocatoria “como una medida preventiva que tenga un efecto de demostración en vísperas del trámite de su paquete de reformas en el Congreso. Una forma de presión popular para empujar su aprobación e indicarle al país que la gente lo apoya” (Santos Calderón, 2023) y lo quiere por lo que es: el primer presidente de izquierda en la historia de Colombia.

En este contexto, aparece el Plan Nacional de Desarrollo 2022-2026 del binomio Petro-Márquez con el sugestivo título de “Colombia, potencia mundial de la vida”, el cual sugiere que “el país tendrá condiciones admirables de longevidad feliz de toda su población y bajas tasas de homicidios y feminicidios, consecuencia de haber disminuido radicalmente la criminalidad.” (Kalmanovitz) Este PND, que tiene 525 páginas sin contar los anexos, se trata de un análisis detallado de la macroeconomía del país y sus perspectivas, además de todos sus sectores. Él pretende “sentar las bases para que el país se convierta en un líder de la protección de la vida, a partir de la construcción de un nuevo contrato social que propicie la superación de injusticias y exclusiones históricas, la no repetición del conflicto, el cambio de nuestra forma de relacionarnos con el ambiente y una transformación productiva sustentada en el conocimiento y en armonía con la naturaleza”.

En esta línea, en el proyecto del Plan “la educación está incluida en el eje de seguridad humana y justicia social; esto es bueno, porque antes venía siendo entendida como un asunto ligado a la productividad económica. El nuevo Gobierno ha entendido que la educación es un derecho humano y hay que recalcarlo con toda contundencia. No nos educamos solamente para ser más productivos, también, y sobre todo, para ser más y mejores seres humanos.” (Álvarez, 2023) Damos la bienvenida a estas iniciativas de política pública educativa y otras que por cuestión de espacio no ampliamos, “pero las hemos encontrado dispersas en el texto, como si se tratara de una sumatoria de acciones. Es necesario hacer explícita la voluntad de construir un nuevo proyecto educativo que aporte a la transformación social. La educación es la condición que hace posible cualquier cambio… ahora esperamos que el Congreso de la República logre dar un debate que termine por incorporar una perspectiva más clara del proyecto político pedagógico que la nación merece, un proyecto que deje ver, de manera más contundente las bases de las grandes transformaciones del sistema educativo colombiano que tanto hemos esperado.” (Ibíd)

El Plan propone que “las transformaciones se realicen teniendo como punto de partida el territorio. Ello significa que su ordenamiento se hará alrededor del agua”. Se trata de reducir “las emisiones de CO2 que envenenan al planeta, aunque Colombia es un agente muy marginal en ese sentido por su atraso económico e industrial. La inclusión vendrá por avances de la reforma agraria y el aumento del gasto público que se desplegará sobre los sectores más pobres de la sociedad.” (Kalmanovitz, 2023) Se intentará hacer la “transformación de las estructuras productivas, de tal manera que las economías limpias y biodiversas reemplacen la producción intensiva en el uso del carbono”. Así, este PND permitirá al Gobierno del cambio remplazar el motor de combustión por el eléctrico.

“El recaudo tributario que calculan efectuar pasa de 19 % del PIB en 2022 a casi 23 % en 2026, cuatro veces más de lo logrado en las pasadas reformas al sistema impositivo… Todas las proyecciones económicas que lanza el Plan son optimistas: la agricultura crece 0,4 % en 2023, pero salta al 6 % en 2026; la industria, de 1,1 % a 5,8 %…; el turismo, de 2,7 % a 6,8 %, y la construcción, de 0,6 % a 5,6 %…” (Ibíd) En esta línea, el DANE dijo que la economía colombiana creció 7,5 % en 2022, lo que nos ubica como una de las economías más sólidas en la región. La misión del Fondo Monetario Internacional (FMI) en el país terminó su labor con un diagnóstico positivo para el manejo macroeconómico. De allí que el anuncio del ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, de ajustar las reformas presentadas en el Congreso a la regla fiscal termine de completar un panorama tranquilizador para los mercados… (El Espectador, 2023B)

Ese Plan impulsa la implementación del Acuerdo de Paz firmado por el Gobierno de Santos y las antiguas FARC, lo que es una buena noticia si tenemos en cuenta que el subpresidente Duque y su presidente eterno casi cumplen con la promesa de su partido de hacerlo trizas en medio de risas macabras. En el texto del Plan “se incluyó la obligatoriedad de recoger de forma progresiva las recomendaciones de la Comisión de la Verdad, que hasta el momento era opcional, así como la renegociación con las comunidades del Programa Nacional Integral de Sustitución de Cultivos de Uso Ilícito.” (V. Santos, 2023). Adicionalmente, establece como criterio de ordenamiento del territorio las determinantes “relacionadas con la conservación, la protección del ambiente y los ecosistemas, el ciclo del agua, los recursos naturales, la prevención de amenazas y riesgos de desastres y la gestión del cambio climático… Plantea además la tan anhelada reforma rural que se llevará a cabo a través de un sistema compuesto por ocho subsistemas, contemplando así aspectos integrales de los problemas de la tierra en Colombia: desde la redistribución de predios hasta el manejo de conflictos socioambientales y la constitución de zonas de reserva campesina.” (Ibíd)

“Por primera vez en nuestra historia las mujeres, la comunidad LGBTIQ+ y las comunidades étnicas tienen un papel preponderante en la visión de desarrollo del Gobierno. Por ejemplo, se reconoce la economía del cuidado no remunerado en lo rural como una actividad productiva, se crea un mecanismo para prevenir y atender las violencias basadas en género y otro para prevenir y atender la violencia y discriminación contra población LGBTIQ+. Además, se promete la formulación de una política de derechos reproductivos y sexuales y la reglamentación de la Ley 70 que reconoce derechos colectivos a comunidades afro. Se fija también una mayor participación de mujeres en todas las juntas de empresas del Estado y entidades financieras.” (V. Santos, 2023). Por último, el Plan Plurianual de Inversiones que acompaña el PND plantea la conexión férrea de gran parte del país; también hace énfasis en el desarrollo de vías terciarias y caminos vecinales.

Así entramos al asunto más protuberante, el del cambio de modelo productivo, la transición energética y el manejo de los hidrocarburos. Aquí “el presidente tiene toda la razón al insistir en que el cambio climático es la más grave amenaza que se cierne sobre la humanidad y en que tenemos un plazo de angustia para dar fin a la dependencia de los hidrocarburos… Esa genuina convicción está en la base del programa del Pacto Histórico y, claro, de la escogencia de sus ministras de Minas y de Ambiente. Ambas ministras tienen formación y méritos a la altura de sus cargos, pero además se trata de activistas en la defensa de las comunidades frente a la gran minería y en el movimiento ecologista internacional, respectivamente.” (Gómez, 2023)

Y con al autor citado paso al caballito de batalla, que ha sido suspender la exploración de hidrocarburos. Vista desde el planeta en su conjunto, la idea es excelente porque el petróleo nos está matando, pero claro Petro no es presidente del mundo y el mundo no tiene presidente: precisamente por eso nuestro presidente hizo un llamado al mayor compromiso planetario en la última cumbre sobre el cambio climático en Egipto que se celebró recientemente. Víctor Mallarino (2023) lo resumió bien en una copla: “El plan del cambio energético / por parte del Pacto Histórico / es robusto en lo retórico / y sólido en lo hipotético. / Un gobierno fuerte y ético / tendrá una agenda pragmática / con prioridad democrática, / coherente con su dialéctica / hoy, para muchos, ecléctica / frente a esta gran problemática.”

Con relación a la reforma de la salud, recogida en un documento de 150 artículos que contempla la formalización del personal asistencial y administrativo de 928 hospitales públicos, ella tendrá un costo de 3,1 billones de pesos: una transformación del sector con la que, según el mandatario, “no habrá más clientes en la salud pública de Colombia”. De acuerdo con Juliana Ramírez (2023), el presidente de izquierda manifestó que hemos “llegado a otro momento clave de este gobierno, después de la reforma tributaria, que demostró, a pesar de las críticas, que era posible tener un régimen de tributación más justo: que los que más tienen más pagan.” Así, entramos a las reformas sociales sustanciales que reivindican una conquista de los movimientos sociales, a propósito de las cuales la ministra de Salud dijo: “No más a negocios con la vida. La salud es un derecho que no admite discriminaciones. Se recuperará la administración pública de los recursos públicos para que sean distribuidos equilibradamente en todos los territorios”.

Bogotá, febrero 12 de 2023. https://www.elespectador.com/opinion/caricaturistas/osuna/reformatorio/

El programa central de la reforma “contempla un modelo preventivo y predictivo, con el que se pretende implementar las visitas domiciliarias, que consisten en que los médicos, enfermeros y psicólogos llegarán a los territorios, especialmente zonas rurales y dispersas, identificando tempranamente las enfermedades. Se calcula que sean cerca de 78.000 personas en equipos básicos dedicadas a esta tarea.” Con respecto a la Administradora de los Recursos del Sistema General de Seguridad Social en Salud –Adres-, que hoy funciona como una especie de banco de la salud, “tendrá unas sedes regionales a través de las cuales se contratará y pagará a los hospitales, clínicas, dispensarios de medicamentos, atención y transporte de urgencias.” (Ramírez, 2023) Y en cuanto a las EPS, “lo cierto es que sus funciones de intermediación financiera y aseguramiento no las tendrán más y pasarán a ser únicamente prestadoras de servicio a través de sus clínicas y hospitales.” (Ibìd)

De esta forma, esta reforma tiene muchos puntos valiosos entre los cuales está su acierto “en mejorar la dignidad de los trabajadores de la salud…  en un país donde sus reclamos no han sido tomados en cuenta, incluso durante la pandemia. También, promover el pago a clínicas, hospitales y prestadores, que es una deuda histórica, hace parte de una discusión necesaria. Si hablamos de deudas históricas, quizá lo más destacable de la iniciativa es la intención de cerrar la enorme brecha con la salud rural. El énfasis en la prevención es correcto.” (El Espectador, 2023)

Es claro entonces que los ACIERTOS de la Primera Pareja Nacional en este primer semestre de su mandato han sido muchos. Los pocos DESACIERTOS han estado centrados en contradicciones en el equipo de gobierno que han dificultado organizaciones adecuadas hacia la opinión pública, la cual ha sido también bombardeada por afirmaciones de la desmedida oposición mentirosa y las manipulaciones de los medios masivos de información al servicio monopólico, lo que ha imposibilitado el total entendimiento de las reformas por parte del pueblo. Además, por la coalición hecha con políticos tradicionales -conservadores y liberales-, se han nombrado personas recomendadas -clientelismo- poco idóneas en cargos gubernamentales que han ha estimulado el desorden gubernamental y noticioso.

Armados de esos desaciertos y otras razones agazapadas, se cumplió el pasado 15 de febrero una nueva jornada de movilizaciones convocada por la patética oposición reacia a los cambios radicales del primer Gobierno de izquierda. En estas marchas mostraron los dientes y se manifestaron de manera violenta y agresiva. Por ello, “Transar con ellos y con su hipocresía, es seguir aplazando las esperanzas del pueblo, puestas precisamente en manos del binomio Petro-Márquez que algunos quieren sepultar y negarle el futuro a éstas y otras generaciones.” (González, 2022) No se puede transar con una oposición que no es “seria ni constructiva sino un antagonismo visceral, con sus líderes compitiendo para ver quién grita y ofende más. No buscan ofrecer una alternativa al poder sino anunciar el apocalipsis e insultar al presidente. Esa estrategia ahonda la confrontación y radicaliza la polarización… Más aún: opinan que el presidente es un guerrillero que destruirá la democracia.” (Botero, 2023)

Estrategia por Jarape, febrero 11/23, en https://www.elespectador.com/opinion/caricaturistas

No obstante, en este medio año de alternativo Gobierno democrático, el presidente ha conversado dos veces con el expresidente Uribe. Estos dos encuentros “en un país de “desencuentros” derivados de la polarización, que no es mala en sí misma, pues pensar diferente no tiene por qué ser sinónimo de enemistad… En este país de enemigos, las reuniones de Petro y Uribe envían un poderoso mensaje de que es posible llegar al “Acuerdo sobre lo fundamental” que necesita Colombia para sanar sus fracturas y avanzar hacia el progreso sostenido… Se trataba de HABLAR sin cálculos ni reservas y, más importante, de ESCUCHAR sin descalificaciones sumarias, con interés por los argumentos y respeto a la diferencia.” (Lafaurie, 2023) En este escenario, escuchar a la férrea oposición uribista es como mirarse en un juego de espejos inquietante y abrumador, es tender puentes para lograr reformas que unan al país alrededor de ellas, porque esta patria herida no resiste más fracturas ni facturas deshonestas.

A pesar de las necesaria reformas planteadas por la dupla Petro-Márquez, faltaría la única pendiente, «que sacaría adelante incluso a este país lleno de vocaciones al mal, al daño, es la instauración de la decencia, la renovación de la virtud. De cierto modo, la gran transformación que hay que tramitar en el Congreso, en las cortes, en los pasillos de la Casa de Nariño y en las plazas de los indignados es el paso de la cultura de la aniquilación a la cultura de la paz, el paso de los enfrascados y alucinantes y tambaleantes Estados de opinión a las exasperantes e impacientes democracias que son sin embargo una tregua.” (Silva, 2023) Pero este país sigue siendo violento porque lleva más de 70 años siéndolo; por eso, el senador Barreras se vio obligado a despedir a su hijo de 14 años en El Dorado antes de que “las fuerzas oscuras” de siempre cumplan sus amenazas al igual que las propinadas al jurista Miguel Àngel del Río, quien está decidiendo si seguirá viviendo en Colombia o no, por los riesgos que enfrenta.

Pero por fortuna esto está cambiando, aunque todo cambio radical «trae miedos y caos y descaches y gritos y reveses. Todo cambio trae escenas inverosímiles e inéditas que detonan el dicho “todo tiempo pasado fue mejor”. Corresponde a quienes han tenido la sartén por el mango, que andan en duelo, aún, por verse obligados a convivir con políticos que en verdad piensan diferente, la tarea de defender las instituciones logradas a puro pulso en estas décadas, pero no como sus dueños, sino como sus partidarios. Corresponde a los ciudadanos no perder la cabeza… y no perder esta oportunidad de desacostumbrarse al machismo, la usura, la injusticia, la violencia política –la política ad hominem– que ha dado millones de víctimas.” (Silva, 2023) Corresponde a los nuevos gobernantes ser serios, ser cuerdos y contundentes como efectivamente lo están siendo Gustavo Petro y Francia Márquez y su equipo de Gobierno: un conjunto humano que en la victoria o la derrota conseguirán una unidad que permitirá plasmar las transformaciones estructurales requeridas por nuestro país amado.

¡Amables lectores multicreyentes, sentipensantes y librepensadores!, es evidente que el binomio Petro-Márquez pasa este primer semestre con una nota muy buena -que él ni ella no se hayan comportado como autócratas y sean tolerantes a las críticas, las controversias y opiniones diferentes habla muy bien de ellos-, aunque se hayan cometido algunos errores, excesos y torpezas. Por supuesto que “no hay ley ni salvación y ningún mesías va a venir a salvarte”, sólo entre todos nos salvaremos: nada cambiará sustantivamente si los colombianos no nos comprometemos ni nos organizamos y luchamos por un bien superior para construir un mejor país. En suma, entonces, el cambio del Pacto Histórico, como todo cambio, ha generado oposición por parte de los intereses ya establecidos, de los líderes ultraconservadores del Centro Democrático y de los populistas de derecha que desembocan en el autoritarismo, circunstancias que han retrasado un poco la acción del Gobierno. Lo que deja claro es que en el próximo semestre y los siguientes es imperiosa la necesidad de actuar con con cautela y determinación, para que como bien lo ha dicho el mismo jefe de Estado, el cambio sea el legado de su mandato y probar así “que la izquierda es necesaria para que la democracia al fin lo sea” no sólo para levantar un mundo nuevo basado en la justicia, en la libertad, en la igualdad, en la paz, sino también para demoler las murallas de los monopolios oligárquicos y las mafias enquistadas en toda la vida nacional: ¡colombianos, la transformación de la Patria por encima de todo!   

INDISPENSABLES MURMULLOS REFERENCIALES

Álvarez, Alejandro (2023). La educación en el gobierno del cambio. El Espectador, Bogotá, publicado el 17 de febrero en  https://www.elespectador.com/opinion/columnistas/alejandro-alvarez/la-educacion-en-el-gobierno-del-cambio/

14 respuestas a «PRIMER SEMESTRE DEL CAMBIO»

  1. Siempre será necesario un cambio en cualquier institución para buscar nuevos aires, sean mejores, regulares o peores, porque enquilosarse genera atraso, y en la dirigencia, cambio y transformación de un estado es aún mayor ese daño. Así que el cambio, hoy justo, necesario y pertinente con el mandato del Dr. Gustavo Petro, que obviamente lo está haciendo muy bien, con su lenguaje y acción anunciado en campaña «Un gobierno por y para la vida» tiene desesperado a unos pocos que nunca pensaron que iba a cesar la horrible noche para una mayoría de Colombianos agobiados por la violencia, iniquidad, pobreza e indignidad humana. Bien Presidente!! vamos por buen camino!! Felicitaciones amigo por excelencia artículo.

  2. Excelente artículo, seis meses de lucha y sacrificio de éste gobierno, bombardeado por todos los flancos de la oposición irracional, sobretodo uribista, pero, el compromiso es con el pueblo que lo eligió y al cual se debe, por lo tanto se deben implementar todas las reformas prometidas en campaña, afectando los intereses de los más ricos, poco a poco las cosas se van dando, la luz se va distinguiendo al final del túnel.

  3. Siempre es conveniente pensar para hablar y no lo contrario!…crear las condiciones para empezar a romper el paradigma de nuestra vida colombiana, es lo que está haciendo PETRO y por eso es un buen mensaje. Como somos parte del “cuento “ debemos entender y atender ese compromiso. Con los que se resisten a ese cambio hay que ser más inteligentes que ellos e ir más allá de su mezquindad y miopía egoísta!
    El camino es largo y culebrero. Andémoslo con atención y conciencia de recorrerlo para bien de todos, inclusive de los que quieren ser obstáculos.

  4. Enjundioso y completo artículo. Con la perspectiva de otra posible sociedad donde existan las mínimas condiciones para el desarrollo de la vida individual y política de cada cual y sea posible una relativa igualdad de oportunidades, las reformas planteadas están con el horizonte de la justicia social.
    Esperemos que así lo entendamos todos, en especial quienes nos hemos considerado siempre con ideas progresistas para el conjunto entero de la población, y despreciamos que un Estado esté sumiso al servicio del capital nacional e internacional.

  5. Un hecho relevante son las informaciones que van en negrilla, con los cambios que se van a dar en la sociedad colombiana va a ver una favorabilidad al ser humano que tanto se ha anhelado en el trasegar de un pueblo tan sufrido como éste, Habrá más presencia del Estado para una transformación a las comunidades menos favorecida… Ejemplar Artículo… Éxito González…

  6. Es la mejor oportunidad que se ha presentado a los representantes del pueblo, pueblo; para que desde sus sillas remedien todo el mal que los gobernantes tradicionales han causado a nuestro Territorio Nacional.

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