LA 1ª NOBEL VENEZOLANA, MADURO, TRUMP Y PETRO

En homenaje a COLOMBIA VILLAMIL QUIROZ, curtida luchadora social y abogada bolivarense con gran experticia jurídica dispuesta a ser una senadora importante en 2026-2030, periodo en el que pretende legislar reformas sociales para ayudar a seguir construyendo un país del tamaño de nuestros sueños colectivos: ¡Ojalá la elijamos! Seguro que no nos defraudará.

¡Amables lectores multicreyentes y sentipensantes!, el pasado 11 de octubre la Academia de Noruega le otorgó el premio Nobel de Paz a María Corina Machado -MCM-, mujer audaz y opositora política que acaba de convertirse en la primera Nobel de Venezuela. Sobre ella, las reacciones al premio y el debate sobre su apoyo a la ofensiva militar de Donald Trump -DT- en el Caribe, voy a hablar ahora entre dos sociedades hermanas estigmatizadas por bélicas narrativas poderosas que las están ahogando en un convulsionado maremagnum de comunicación falaz e incesante aguacero de mentiras –“si conociéramos el horror y la gravedad del mentir, lo perseguiríamos hasta la pira con mayor justicia que a otros crímenes”- por el bombardeo criminal a sus supuestas narcolanchas.

El galardón a MCM –Caracas, 58 años- es un “reconocimiento a su entrega, a su lucha por la democracia en Venezuela, a su defensa de los derechos humanos en el país vecino, y un espaldarazo mundial no solo a su liderazgo opositor sino un homenaje a todos los venezolanos que anhelan la caída de la dictadura y un muy pronto retorno a la institucionalidad.” (EE, 2025) El Consejo Noruego de la Paz consideró que ella ha desarrollado un “incansable trabajo promoviendo los derechos democráticos para el pueblo de Venezuela y por su lucha por lograr una transición justa y pacífica de la dictadura a la democracia”. Así, Nicolás Maduro -NM- recibe otro golpe internacional que debilita su imagen de por sí ya debilitada.

M.ª Corina logró en 2024 articular un gran movimiento opositor en torno al candidato unitario Edmundo González Urrutia -EGU-, “ante su imposibilidad de ser candidata tras una arbitraria decisión administrativa impuesta por la Contraloría. A pesar de la manipulación y la presión desde diversas instancias del Estado, en un país donde no existe la separación de poderes, se llegó a las elecciones presidenciales del 28 de julio de 2024 ante la incertidumbre sobre la reacción del régimen frente a un resultado no favorable, como todo lo hacía presagiar.” (Ibíd) El gobierno ilegítimo optó por el fraude al reclamar la victoria sin presentar una sola prueba. El Centro Carter, invitado por el mismo NM, desestimó el falso resultado y presentó ante la OEA copia de las actas electorales que le daban al triunfo a EGU (ver https://www.dairogonzalezquiroz.com/leer/el-dictador-esta-maduro/).

MCM ha sorteado diversos altibajos en su camino político transitado. “Ha representado el ala más beligerante de la oposición y, hacia finales de la primera década del presente siglo, llamó al abstencionismo en unos comicios que le dieron la casi total mayoría en la Asamblea Nacional al chavismo. Mantuvo fuertes discrepancias con Leopoldo López, Henrique Capriles y, durante el gobierno interino de Juan Guaidó, se alejó del mismo por la cercanía de este con López. Cuando el involucramiento de los Estados Unidos permitió despejar el camino a las últimas elecciones, en octubre de 2023 obtuvo el 92,5 % de los votos en las internas del bloque opositor.” (EE, 2025) Ante la imposibilidad de competir, como ya dijimos, le dio su aval a EGU. Tras el fraude, y desde finales de julio de 2024, ella y su pueblo mantuvieron la presión en las calles para exigir el respeto por el resultado, pero la represión del régimen, con muertos, heridos y encarcelamientos masivos de personas que se manifestaron pacíficamente, obligó a M.ª Corina pasar a la clandestinidad en la que permanece desde entonces.

En un comunicado publicado en sus redes sociales, ella aceptó el Nobel “en nombre del pueblo de Venezuela, que ha luchado por su Libertad con admirable coraje, dignidad, inteligencia y amor (…) los venezolanos hemos sufrido… años de violencia y humillación a manos de una tiranía obsesionada con someter a los ciudadanos y quebrar el alma de la nación. -El premio es- un firme llamado para que la transición a la democracia en Venezuela se concrete de inmediato”. A pesar de los crímenes de lesa humanidad cometidos por NM, la tenacidad con la cual ella “asumió la defensa de la democracia en Venezuela es la máxima esperanza y garantía de que la dictadura tendrá que salir del poder, para que sea el legítimo ganador de las elecciones el que asuma la presidencia.” (Ibíd)

Antes las expectativas frustradas del presidente estadounidense DT por el Nobel de Paz, M.ª Corina le dedica su galardón sugiriendo que él era el que lo merecía: “al sufrido pueblo de Venezuela y al presidente Trump por su decisivo apoyo”, afirmó. Enseguida él reaccionó: “Machado me llamó y dijo: ‘Estoy aceptando el premio en tu honor`”. En honor al presidente procesado -al que, en rigor, no le interesa si en Venezuela hay o no hay democracia, sino las riquezas de este país-, ha sido toda una diabólica puesta en escena para camuflar el horror de un genocidio. Sí, el genocidio perpetrado por Israel -con la complicidad soterrada y abierta de EE. UU.- en la Franja de Gaza.

María Corina, Nobel de paz por Osuna, 13 de octubre de 2025, https://www.elespectador.com/opinion/caricaturistas/osuna/maria-corina-nobel-de-paz/

Precisamente DT “esperaba el premio por su mediación en Gaza, pero el cese al juego fue tan solo una maniobra para sacar a su amigo Netanyahu del callejón sin salida que implicaba su proyecto genocida de extirpar la resistencia palestina.” (Gómez, 2025) A pesar de la dedicatoria de MCM, su lucha pacífica contra la dictadura venezolana, su defensa del voto y de la libertad “son un ejemplo exacto del ideal que inspiró al fundador del premio Nobel. Pero también en su caso, el premio es parte de un relato político: la heroína liberal frente a la tiranía” (Ibíd) supuestamente socialista, el símbolo útil para enfatizar que ojalá la democracia puede recuperarse sin violencia.

Este galardón llega en un momento de máxima tensión para Venezuela: “un país que enfrenta no solo una crisis política interna, con el autoritarismo de un régimen que ha socavado los derechos fundamentales, sino también presiones externas que amenazan su estabilidad y su soberanía… Este Nobel trasciende lo simbólico. Es un gesto que reafirma la necesidad de respeto al Estado de derecho, la exigencia de justicia y la fuerza de la palabra frente a la intimidación totalitaria.” (EP, 2025)

El Nobel a Machado adquiere aún mayor relevancia en el contexto de las recientes maniobras militares de USA cerca de Venezuela. La Administración de DT -que se quedó sin la ansiada condecoración en favor de una de sus más fervientes aliadas en Latam ha desplegado aviones de combate y destruido embarcaciones supuestamente vinculadas al narcotráfico y al terrorismo, “causando decenas de muertes y elevando la tensión regional. Ese escenario externo agrava el cuadro interno. Enfrentar la crisis venezolana exige claridad sobre el papel que pueden y deben jugar los actores internacionales. No se trata de renunciar a la defensa legítima de la soberanía nacional, tampoco de alentar una escalada que solo multiplique las víctimas. Un Nobel que premia la paz debe leerse como una advertencia contra la lógica del desbordamiento militar, sea desde dentro de Venezuela o desde fuera, y como una invitación a encauzar la confrontación por la vía política y diplomática.” (Ibíd)

Lo contradictorio es que el Nobel de Paz se utilice para justificar un ataque de los EE. UU. en territorio venezolano. MCM, en el pasado, ha expresado posiciones amistosas a una intervención trumpista y ha visto con buenos ojos los ataques contra botes en aguas internacionales sin debido proceso. Por eso, los reparos que despertó su premio en el mundo progresista no deben pasarse por alto, así el valor con el que ella ha arriesgado su vida en el intento de derrocar una dictadura por las vías pacíficas y democráticas no puede ser más encomiable. Pero es claro que para tumbar la dictadura M.ª Corina se aliaría con quien amenaza la democracia en Norte y Latam, en la que Colombia ahora se convierte en otro blanco de DT al descertificarla, quitarle la visa al contestario presidente Petro (https://www.dairogonzalezquiroz.com/leer/la-descertificacion-gringa-y-su-visa/) y llamarlo desquiciado y maleante e incluirlo como líder del narcotráfico en la Lista Clinton: toda una agresión contra un país entero. Tal vez desde el despojo de Panamá no registraba Colombia amenaza semejante a su soberanía y a su economía.

En torno a menosprecios e inquinas mutuas entre el lunático abusador de DT, que se cree Julio César, y el protestante Gustavo Petro -GP-, que se compara con Simón Bolívar, tengo que decir, apoyado en Óscar Alarcón, que ellos han metido tanto las patas que a Trump ya lo llaman el Pato Donald y a Petro, el Petardo; ¡ah!, y si el presidente de USA no se cansa de dar Trum… padas, el colombiano tampoco se cansa de dar Pe…dradas. A ellos le cae bien la máxima del chileno Vicente Huidobro: “adjetivo que no da vida, mata”. En la mitad del autócrata 1er presidente procesado y del contestario 1er presidente exguerrillero, estamos el 90 por ciento de los colombianos sufriendo porque lo que se necesita para gobernar un país no es reacción inmediatista ni enfrentamiento de ideologías, sino cordura y diplomacia.

A través de la historia, el Nobel de Paz ha reconocido luchadores y visionarios, pero también ha encarnado las complejidades de la lucha por la paz, y quien lo recibe “no obtiene un diploma de santidad, sino un reconocimiento en un momento específico de la historia. A veces se premia una causa emergente que merece apoyo internacional; otras, un logro concreto en una coyuntura de esperanza. Por eso, el Nobel de Paz siempre será polémico. Lo fue cuando se le otorgó a Henry Kissinger, a Barack Obama o a Juan Manuel Santos.” (Vladdo, 2025) Este Nobel no es un sacramento, sino una forma de amplificar los esfuerzos por la libertad y los derechos humanos. De ahí que ahora la polémica se repite con el concedido a MCM.

La izquierda colombiana y de otras latitudes experimentaron gran desconcierto con el galardón a la venezolana. No creo prudente pasar de agache ese desconcierto. El presidente colombiano la criticó por haberlo dedicado al presidente estadounidense procesado y por haberse acercado a Netanyahu, actores principales del genocidio en Gaza. Lamentable que ella espere “que Trump y sus aliados le ayuden a completar la tarea de su vida. Por eso, mientras el mundo siga confundiendo la justicia con la impunidad y la paz con la victoria del aliado, el Nobel de la Paz seguirá premiando la conveniencia en lugar de la conciencia.” (Gómez, 2025)

 

Cañoneras en altamar por Mheo, 24 de octubre de 2025 https://www.elespectador.com/opinion/caricaturistas/mheo/mheo-374/

En esta línea, indignado, el español Pablo Iglesias trinó de acuerdo con Mauricio Rubio (2025): “para darle el Nobel de la paz a Corina Machado, que lleva años intentando dar un golpe de Estado, se lo podrían haber dado directamente a Trump o incluso a Hitler a título póstumo”. Para el también español Juan Carlos Monedero “era un poco excesivo hasta para los sionistas de Israel juntar a Netanyahu con Trump para el Premio de la Paz… han optado por unir a una persona con ambas facetas”.

Los pronunciamientos de la presidenta de México Claudia Sheinbaum fueron parcos con la heroína venezolana: Sin comentarios, dijo. Esta mandataria de la izquierda latinoamericana comparte con GP una interpretación contradictoria sobre la dictadura de El más burro, que con acierto Fabián Sanabria llama Maburro. Sheinbaum y Petro han invocado la libre determinación de los pueblos, defendida por la ONU, desde 1945. El derecho de autodeterminación les permite a los pueblos decidir su forma de gobierno y organizarse libremente, sin injerencia de países foráneos, para obtener un mayor desarrollo social, cultural y económico. Por lo anterior es que parte del flanco progresista occidental estuvo en desacuerdo con el otorgamiento del Nobel a MCM, pues el belicista declarado -acaba de cambiarle el nombre al Ministerio de Defensa de su país por el de Ministerio de Guerra-, DT, no ha hecho otra cosa que amenazar a NM, a GP y a todo el mundo para que hagan lo que él quiera.

Daniel García-Peña, el embajador de Colombia en EE. UU., aclaró a la redacción política de El Espectador (oct 23) que el tema de Venezuela hace parte de las tensiones con el país del norte, pero el presidente Petro no defiende al régimen de Maduro, al contrario, hay tensiones con el gobierno de Maduro; no se ha reconocido el supuesto triunfo de la elección y hay diferentes temas críticos, como la situación de colombianos encarcelados en Venezuela. Lo que sí ha hecho el presidente es defender la soberanía de Venezuela, la soberanía de Suramérica y el absoluto rechazo a cualquier eventual intervención o utilización de la militar, que es una cosa muy distinta. Pero, sin duda, el tema de Venezuela sí hace parte de toda esta situación compleja que estamos viviendo.

El apasionamiento con que Machado y algunas voces en Colombia y Venezuela piden una intervención militar de EE. UU. en ambos países muestra “un desconocimiento de las lecciones de la historia de nuestra región; y, en el peor de los casos, una complicidad preocupante con un presidente estadounidense que no tiene reticencias para abusar de su poder y silenciar a todo el que se le oponga.” (Ibíd) Sí, el Gobierno de GP ha cometido sus errores y peor aún el régimen de Maburro es dictatorial y le ha hecho mil trampas a la democracia de su país, pero es muy peligroso tirar por la borda la soberanía y las reglas del derecho internacional creyendo que viene un salvador desde el norte. En las pasadas elecciones, que EGU ganó con holgura, cuestionamos las mentiras de NM. También criticamos la ambivalencia del gobierno de GP, que no reconoció las elecciones, pero tampoco quiso cumplir un papel más determinante en aislar internacionalmente a Maburro y a sus cómplices.

En pocas palabras, creer que DT es un liberador en defensa de la democracia es un error craso. La semana antepasada “confesó abiertamente que autorizó a la CIA para llevar a cabo operaciones dentro de territorio venezolano. Su movilización de tropas en el Caribe ha terminado en la ejecución extrajudicial de más de dos decenas de personas, acusadas de ser narcotraficantes sin prueba alguna y como si el narcotráfico fuese un delito que amerita la pena de muerte. The New York Times publicó información confidencial en la que se demuestra que el gobierno Trump estuvo considerando la oferta de Maduro de otorgarles nuevos contratos de explotación petrolera a empresas estadounidenses a cambio de su permanencia en el poder. Mientras tanto, dentro de su propio país, Trump ha enviado tropas federales a ciudades administradas por alcaldes del partido opositor, bajo la excusa de que hay una guerra en sus calles.” (EE, oct 19) ¿Ese es el líder que va a traer democracia a sangre y fuego en Venezuela y Colombia?

La excusa para dicha operación de EE. UU. ha sido detener el narcotráfico. Si es así, ¿dónde trazarán la línea? DT agrega que Colombia -gobernada por un supuesto líder narcotraficante incluido en la Lista Clinton-, con sus cientos de miles de hectáreas cultivadas de hoja de coca y con sus exportaciones difíciles de controlar de cocaína, también amerita intervención. Obvio Venezuela es una cosa y otra es la, aunque imperfecta, sólida democracia colombiana; nosotros no somos un país gobernado por un tirano, como sucede en Venezuela, asimilarnos a ella es desconocer nuestro presente y pasado. No obstante, “el problema está en los criterios ambiguos. Si aceptamos que un país se arrogue la autoridad para intervenir en otro a su antojo, las líneas se desdibujan. Se aplica la ley del más fuerte que, en este caso, termina también siendo un matoneo sin control alguno.” (Ibíd) Así, la relación de USA con Latam “se está convirtiendo en un infierno”, como bien lo dijo el expresidente Ernesto Samper Pizano.

En fin, capturar o asesinar a NM no soluciona el problema en Venezuela. Los golpes de Estado en América Latina “auspiciados por la CIA llevaron a décadas de inestabilidad, resentimiento, autoritarismos y empobrecimiento. Sabemos que es persuasivo creer que todos los demonios del país vecino se solucionan con una operación militar precisa” (EE, oct 19) u operación quirúrgica, empero ese tipo de pensamiento mágico pertenece a las películas de superhéroes, no a la realidad.

Pataletas por Zuleta, 23 de octubre de 2025, https://www.elespectador.com/opinion/caricaturistas/zuleta-zuleta/pataletas/

Parece ser que el verdadero propósito de los ataques armados a las presuntas narcolanchas que DT ha desplegado en el Caribe sea “inducir suficiente miedo como para que los malos huyan. También es la opinión de Machado: Maduro y sus compinches, dijo a la BBC la semana pasada, “no se irán a menos que se dé cuenta de que existe una amenaza creíble, de que las cosas van a empeorar cada día que pase para ellos”.” (Stephens, 2025) Eso, a su vez, requiere que el gobierno de DT esté dispuesto a continuar la escalada, hasta llegar a una confrontación militar a gran escala, lo que sin duda entrañaría riesgos incuestionables y mortales, tanto para los venezolanos como para los estadounidenses; pero sobre todo para Venezuela y América Latina.

Por fortuna, el premio Nobel de la Paz sigue siendo un faro de esperanza en un mundo lleno de conflictos e injusticias. “A través de la historia, ha reconocido luchadores y visionarios, pero también ha encarnado las complejidades de la lucha por la paz. El reconocimiento a María Corina Machado representa no solo su valentía, sino también la voz de un pueblo que clama por libertad. En un mundo donde la voz de la paz se apaga a menudo, cada galardonado es un recordatorio de que siempre hay quienes están dispuestos a levantarla, y que sus historias merecen ser contadas y celebradas.” (Charry, 2025)

Imagino los estados emocionales en que se encuentran NM y GP, que deben estar pensando en la suerte que corrió el hermano pueblo panameño de Noriega en 1989. Al parecer, ellos se encuentran perturbados, evasivos y ensimismados. Puede ser un mecanismo de escape ante las dificultades que los abruman, pero más vale que aterricen en la dura realidad porque el palo no está para cucharas. Los anuncios y acciones desde Washington ubican a sus Gobiernos en una situación muy complicada. Uno de los grandes interrogantes del momento es el de la viabilidad de que MCM pueda acudir a la ceremonia donde le será entregado el reconocimiento. La dictadura lo va a impedir, pero ese régimen ya perdió la batalla moral.

Sea como fuere, para nosotros, para Venezuela y para toda América Latina es un triunfo y una esperanza que el Nobel de la Paz lo reciba por 1ª vez una lideresa venezolana. A pesar de las críticas válidas al premio, reitero, éste es un reconocimiento a la lucha de su bravo pueblo y al de ella por la democracia en un país con un autoritario régimen atrincherado y presionado por fuerzas externas que amenazan su estabilidad y soberanía. Ojalá que este galardón sea una oportunidad para impulsar una salida pacífica en su patria, sin injerencia gringa que escale militarmente el conflicto.

A pesar de que Maburro está convencido de que no lo tumbaran porque tiene Padrino, a San Gregorio y a la Santa Rendiles, estoy casi seguro que va a caer por la fuerza del bravo pueblo venezolano, y ahora más pues ese pueblo ha sido reconocido precisamente por su lucha y obvio la de M.ª Corina, quienes en los últimos años están por la democracia en esta patria hermana. Hay que confiar en que esta presea no se convierta en una bandera de confrontación, sino en una oportunidad para reforzar la voz del pueblo venezolano que reclama una salida institucional, pacífica y legítima. El desafío más urgente no es si Machado irá o no a recibir la condecoración, ni tampoco la victoria de una facción, sino la reconstrucción de las condiciones para que Venezuela pueda dialogar, acordar y recomponer su rumbo democrático.

La 1ª Nobel venezolana ha solicitado ayuda militar para derrocar a un régimen dictatorial que parece imposible de cambiar por vías pacíficas: esa es una posición muy peligrosa para su país y Latam, pues con la candela del lunático presidente procesado no se juega, y con nosotros tampoco: No nos dejemos arrinconar de él ni de nadie. Esa solicitud y el bombardeo de las presuntas narcolanchas en el Caribe y en el Pacífico se siente como un abuso de poder más y una falta de respeto a las democracias venezolana y colombiana. “Esperemos que la decisión de Trump de trasladar del Mediterráneo al Caribe al más poderoso portaaviones de Estados Unidos no sea más que otra bravuconada intimidatoria. Pero quién sabe. Se le notan demasiadas ganas de pasar a hechos más contundentes.” (Santos, 2025). En vísperas de elecciones colombiana o de cualquiera otra nación, ningún país por más imperio que sea debe buscar intervenir en la autonomía de un proceso electoral.

No comulgamos con las arbitrariedades, el racismo, y las violaciones al derecho internacional que una y otra vez comete DT, “declarando guerras donde no las hay, matando como si fueran terroristas a quienes son, probablemente, traficantes, lo que le da derecho a interceptarlos y detenerlos, pero no a matarlos como si carecieran de cualquier garantía legal.” (Abad, 2025) Es indispensable unirnos para evitar una catástrofe y hacerle caer en cuenta a EE. UU que tanto Venezuela como Colombia merecemos respeto, pues, nuestra lucha contra el narcotráfico ha sido heroica, mientras ellos no han logrado combatir las drogas en su propio país. Una situación de crisis como la actual exige encauzar la confrontación por la vía política -no ideológica- y diplomática que garantice nuestra integridad nacional construyendo unidad sin fisuras frente a la bota imperial.

Publicado en El Espectador, Octubre 23 de 2025 https://mrp-ee.blogspot.com/2025/10/maria-corina-machado-y-donald-trump.html 

INDISPENSABLES MURMULLOS REFERENCIALES

Abad Faciolince, Héctor (2025, oct 26). Trump versus Petro. El Espectador, Bogotá, https://www.elespectador.com/opinion/columnistas/hector-abad-faciolince/trump-versus-petro/

Charry Urueña, Juan Manuel (2025, oct 16). Premio Nobel de Paz: ocaso entre gloria y controversia. Semana, Bogotá, https://www.semana.com/opinion/articulo/premio-nobel-de-paz-ocaso-entre-gloria-y-controversia/202501/

De la Torre, Cristina (2025, sept 23). El mono descertificaEl Espectador, Bogotá, https://www.elespectador.com/opinion/columnistas/cristina-de-la-torre/el-mono-descertifica/

elespectador.com (2025, oct 11). Un Nobel para la tenacidad de María Corina Machado. Editorial de El Espectador, Bogotá, https://www.elespectador.com/opinion/editorial/un-nobel-para-la-tenacidad-de-maria-corina/

elpais.com (2025, oct 10). Nobel de la Paz para la democracia. El país de España, Madrid, https://elpais.com/opinion/2025-10-10/nobel-de-la-paz-para-la-democracia.html?event_log=oklogin

Gómez Buendía, Hernando (2025, oct 19). Machado, Trump y Petro. El Espectador, Bogotá, https://www.elespectador.com/opinion/columnistas/hernando-gomez-buendia/machado-trump-y-petro/

Rubio, Mauricio (2025, oct 23). María Corina Machado y Donald Trump: insólita alianza contra Maduro. El Espectador, Bogotá, https://www.elespectador.com/opinion/columnistas/mauricio-rubio/maria-corina-machado-y-donald-trump-insolita-alianza-contra-maduro/

Santos Calderón, Enrique (2025, oct 26).  SE VOLTEÓ LA TORTA. Los Danieles y Cambio Colombia, Bogotá, https://cambiocolombia.com/los-danieles/articulo/2025/10/se-volteo-la-torta/

Stephens, Bret (2025, oct 11). La dignidad de María Corina Machado, premio nobel de la Paz. The New York Times, New York, https://www.nytimes.com/es/2025/10/11/espanol/opinion/nobel-paz-maria-corina-machado-venezuela.html

7 respuestas a «LA 1ª NOBEL VENEZOLANA, MADURO, TRUMP Y PETRO»

  1. Profesor, tema bien polémico. Lo de dedicarle el premio al asesino de Gaza, pues es quien mueve desde el Pentágono al títere israelí, es absolutamente lamentable. La mujer si tiene muchos méritos y merecimientos por su valentía. Me extraña desde siempre que los venezolanos no consoliden un movimiento de liberación propio, de carácter popular, que pueda mover a todos los sectores en busca de su democracia. La payasadita de Maduro al consolidar el fraude, anunciando triunfo electoral con dos funcionarios suyos, es un buen aliciente para reír, desafortunadamente, en este caso no se puede hacerlo sin que la amargura desdibuje el rostro. En fin, que se podría pensar que esa diáspora lastimosa de los hermanos vecinos, estaría mejor empleada en la creación de organización popular dentro de sus fronteras.

  2. Sin excusas, sin permisos; las guerras siempre han vivido, están viviendo y lo estarán alrededor de las riquezas naturales; es lo que importa a las potencias de nuestro globo terráqueo.

  3. Dar al César lo que es del César… Meritorio el Nobel a MC, la soberanía es una ley universal que no se ha tenido en cuenta en este Conflicto que también repercute en Colombia.

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