BONNETT Y SHEINBAUM, ¡INMENSAS!

A las hermanas González Romero (la ingeniera emprendedora Pamina Amelia y la economista ecológica Raiza Andrea), dos de mis cuatro vástagos andinos de alma, vida y corazón. Espero que en Bonnett y Sheinbaum encuentren algo más para seguir adelante, y así continuar concretando la predicción garciamarquiana que en este milenio ojalá el mundo esté bajo el mando femenino para tener otro mundo mejor.

Como la mayoría sabe el pasado 2 de junio se eligió a Claudia Sheinbaum Pardo -CSP- como presidenta mexicana por primera vez en su historia bicentenaria. Y como la minoría también lo sabe el pasado 3 de junio fue concedido el premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana a la colombiana Piedad Bonnett Vélez -PBV- otorgado conjuntamente por la Universidad de Salamanca y el Patrimonio Nacional de España. De estas inmensas féminas iberoamericanas trata mi semblanza comparativa.

Efectivamente, mientras la poeta, escritora y dramaturga PBV, una de las voces más fuertes de la poesía iberoamericana, fue galardonada con el XXXIII Premio Iberoamericano de Poesía Reina Sofía -“Nobel de poesía” en letras en español y portugués- por la profundidad y belleza con la que se acerca a la vida y por ser capaz de convertir “el dolor en arte”, esto es, “un canto amoroso sin compasión, alabado de cicatrices.” La académica, científica y política mexicana de origen judío CSP, una de las grandes líderes contemporánea de México, fue elegida presidenta de su país, siendo la primera en alcanzarlo en sus 200 años de Independencia.

Esta mujer alcanzó esa proeza con el 60% de los votos, porcentaje que supera el 53% que alcanzó Andrés Manuel López Obrador -AMLO- en 2018, “todo un logro para una candidata con menos carisma político, pero que se beneficia del arrastre del popular líder y ha ido ganando apoyos propios. Mucho se cuestionó en este tiempo si un país machista como México estaba preparado para tener una presidenta. Las urnas han dado un rotundo sí.” (Morán, 2024) Y al mismo tiempo, la gran escritora colombiana logró el premio lírico mencionado por encima de egregios hombres poetas que estuvieron postulados.

En verdad, México es el país más machista del continente. Sus hombres “van con pistola al cinto y resuelven sus celos amorosos a tiros, exaltados en populares rancheras… Es más, las cosas llegaban en México hasta un punto en que una dama, por distinguida que fuera, que no tuviera a un hombre o a un marido rico que la sostuviera, era minimizada por sus amigas.” (Londoño, 2024) Claro que Colombia no se queda tan atrás pues los cotidianos maltratos a las mujeres y los constantes feminicidios son muestra de ello, que también son motivados por varias razones, pero sobre todo por la música y las telenovelas que tienen un fondo machista. No es azar que Colombia y México sigan presos de conductas agresivas contra la mujer sin parangón en Sudamérica: “El machismo siempre es una amenaza de desprecio y violencia, pero, como se lee en las novelas de Gabriel García Márquez, hace mujeres poderosas”, dice la empoderada Bonnett sin ninguna piedad.

En este contexto, lo de la primera mujer presidenta de México es emocionante, pues, “es el resultado de las luchas de los movimientos feministas, de las reformas políticas, de la implementación real de la paridad en cargos públicos. Sheinbaum, además, representa un proyecto de izquierda, su elección va en contra de las tendencias de la región, en donde gobiernos autoritarios… se están montando al poder. ¿Cómo logró hacerlo, y además ser la presidenta más votada de la historia de México?” (Ruiz, 2024) En parte fue gracias a un hombre llamado AMLO, quien la ungió como su sucesora por su lealtad a Morena o Movimiento de Regeneración Nacional -joven partido fundado en 2011 que conquistó la mayoría mexicana-, y también porque era estratégico lanzar a una mujer.

Además, CSP es capaz e inteligente, “tiene mucha experiencia en lo público y entiende a la perfección los intríngulis del movimiento. Sus detractores han cuestionado su independencia del presidente y su ´falta de personalidad` pero, a juzgar por lo mal que nos ha ido en toda la región votando por grandes personalidades, esa puede ser una de sus mayores virtudes.” (Ruiz, 2024) Desde el primer minuto en que AMLO subió al poder “empezó a planear cómo darle continuidad a su proyecto, y por eso esta elección, desde hace muchos meses, se sentía cantada.” Ibíd) Por el otro lado de la primera mujer colombiana en obtener el premio iberoamericano de poesía también es emocionante, pues, PBV es una gran poeta y ese premio es la máxima distinción en español y portugués en obras del género lírico, que destaca un aporte relevante al patrimonio cultural común de España e Iberoamérica. Para el jurado, “su poesía muestra una trayectoria sólida y orgánica, con gran coherencia en su obra poética”.

Escudriñando en sus orígenes, vemos que nuestra poetisa es hija, nieta y hermana de maestros, que nació en 1951 en Amalfi, un municipio hermoso del Nordeste antioqueño, frío y rodeado de abismos, aislado y relativamente ilustrado, a varias horas de Medellín, capital del departamento de Antioquia. Sus padres son rígidos católicos tradicionales, pero con una ética implacable que le ha servido de guía en su estética y vida. Y la presidenta electa nació en 1962 en la muy contaminada Ciudad de México, capital de ese país patriarcal, “en el seno de una familia judía secular de origen lituano y búlgaro”​ conformada por el químico Carlos Sheinbaum Yoselevitz y la bióloga Annie Pardo Cemo, quienes le dieron una educación primaria y secundaria de calidad combinada con la práctica de ballet durante 14 años.

Foto: efe -José Méndez- reproducida por elespectador.com, Bogotá, junio/24

En la capital de Colombia y en la capital del departamento de Santander del Sur “fui educada en primaria y secundaria con lo mejor y lo peor de la religión: en el rigor que le exige a uno ser bondadoso y compasivo, pero invadida por la culpa. Me sentía pecaminosa porque me expulsaron del colegio por hacer cosas de niña, como bajarme del bus una parada antes. Temía más a mi papá que al colegio. Me metieron en un internado. Las monjas no buscaban potenciarnos, querían someternos”, le dijo PBV a la periodista Anatxu Zabalbeascoa en 2019. No obstante ese ambiente apareció la poesía, según Octavio Paz, como “conocimiento, salvación, poder, abandono. Operación capaz de cambiar al mundo, la actividad poética es revolucionaria por naturaleza; ejercicio espiritual, es un método de liberación interior”.

En efecto, la familia de Piedad había llegado a Bogotá cuando ella tenía 7 años y, pensando en la calidad de su educación, la inscribieron en un colegio de monjas al cual no se acopló. “Entonces, desconcertados por no saber qué hacer con esa niña, sus padres decidieron enviarla a un internado en Bucaramanga. Este fue un momento muy importante de su vida porque la aquejó una úlcera duodenal que la obligó a pasar días enteros acostada, retorciéndose de dolor. Esa experiencia es muy importante en su poesía por dos razones. La primera es que en esa época publicó su primer poema en una revista de la ciudad. La segunda es que esos dolores la llevaron a ser muy consciente de su cuerpo, de cómo cada cosa la somatizaba.” (Otálora, 2021) Así, su vida empezó a estar signada por el dolor, y ese dolor encontró su camino efectivamente en la poesía. Mientras tanto, los padres de CSP participaban “activamente en los círculos de la izquierda mexicana durante la década de 1960, en protestas, movimientos obreros y revueltas estudiantiles.” A pesar de esos ambientes diferentes o por ellos, cada una en su campo, estas dos mujeres valientes han salido adelante.

Cuando PBV tenía 20 años tuvo a su primera hija. “Eran los años 70, una época en que las mujeres empezaban a ganar espacios en nuestro país… Ese cambio en su vida no fue nada sencillo, porque los hijos no son como los pintan en las comedias románticas… Los hijos son un espejo terrible en el que nos vemos y, por eso, son capaces de sacar lo más bello de nosotros, pero también lo más horrible. Entonces esa maternidad confrontó a Piedad de nuevo con el sentido de su vida, la puso a reflexionar sobre ese “deber ser” que se impone a las personas y, sobre todo, a las mujeres.” (Otálora, 2021).  No le fue sencillo tramitar esos sentimientos, pero la poesía -siempre la poesía- estuvo allí para convertir el torbellino en palabras. Al mismo tiempo, saca la Licenciatura en Filosofía y Letras de la Universidad de los Andes donde después es profesora desde el 1981 hasta 2019. Por su lado, CSP estudió en la Universidad Nacional Autónoma de México -UNAM-, donde obtuvo, en 1989, la Licenciatura en Física; luego, en 1994, la Maestría en Ingeniería Energética. En 1995 fue la primera mujer en obtener el doctorado en «ingeniería en energía» de la UNAM. Ha escrito numerosos artículos científicos y también en 1995, se incorporó al cuerpo académico del Instituto de Ingeniería de la UNAM, centrando su trabajo en la investigación sobre la vinculación entre energía y cambio climático.

La académica e intelectual colombiana ha sido prolífica y polifacética —ha escrito poesía, novela y teatro—, pero poeta por encima de cualquier cosa, la suya es una literatura para digerir la vida que indaga en lo incómodo o en el descubrimiento de la modernidad hasta que un suicidio cercano le dio la vuelta a todo. Claro que una de las compensaciones a la inmensa escritora le llega a través del XI Premio Casa de América de poesía americana que recibió en 2011, por Explicaciones no pedidas. Entre tanto, CSP sería jefa de Gobierno de Ciudad de México entre el 2018 y el 2023, y antes se desempeñaría como secretaria de Medio Ambiente del Distrito Federal de 2000 a 2006 y jefa delegacional en Tlalpan de 2015 a 2017. En esos cargos esta científica ecologista y política de izquierda demostraría que “toma decisiones a partir de los datos, escucha a sus colaboradores y no se precipita; es franca en sus opiniones y firme en el sí o en el no.” (Raziel, 2024) Además, ella tiene “cierta parte maternal, como de cuidado, pero al mismo tiempo deja clarísimo que las decisiones las toma ella, sin necesidad de decirlo. Navega esas dos cosas de manera muy grácil, como bailarina”. (Ibíd)

Mientras la presidenta electa mexicana se casaba en 1987 con Carlos Imaz Gispert, miembro fundador del Partido de la Revolución Democrática y jefe Delegacional de Tlalpan (2003-2004), pero luego se separaba en 2016 (Ibíd) después de tener dos hijos. El 17 de noviembre de 2023 contraía matrimonio con Jesús María Tarriba, doctor en ciencia física por la UNAM y excompañero universitario, con quien vive actualmente. La talentosa colombiana tendría otro hijo que se suicidó siendo joven. Ella había dejado “ver su impotencia y el temor a la muerte de su hijo en algunos de sus versos —“No tengo cuerda ni red para salvarte. Ni siquiera tengo orilla certera”— del poemario Las herencias (2008). Narró su suicidio en Lo que no tiene nombre (2013). Trató de ponerse en la piel de otros inadaptados en el poemario Los habitados (2017) y ahora ha colocado al protagonista de su última novela, Donde nadie me espera, contra todo: sus miedos y un país hostil en una huida desesperada.” (Zabalbeascoa, 2019) 

Foto de Carlos Spottorno reproducida por El país de España, Madrid, 2019

En la entrevista citada del diario El País de España, nuestra inmensa poeta dijo: los poetas y “lectores de poesía somos una especie de secta perseverante. Durante 30 años di clase en la Universidad y siempre estaba el muchacho que leía y escribía. Las necesidades expresivas de un adolescente pueden atraerlo intuitivamente solo con que le golpeen tres versos, con que alguna vez haya oído a Serrat, por ejemplo. Siempre hay seres con esa necesidad.” Paralelamente, la heredera de las banderas del presidente AMLO, en sus acciones académicas, científicas y políticas, ha visto que la gente en su país está ávida de cambios socioeducativos, culturales y mejoras en su calidad de vida. Así, con una de las votaciones más alta de toda la historia del México, ella refrendó la idea de la cuarta transformación, que se inició en 2018 con el actual presidente como “un proyecto político que aspira a reducir las brechas de pobreza y desigualdad, y con ello descentralizar la presencia estatal para llegar a las zonas más abandonadas…” (Sosa, 2024) Ese proyecto surgió “con la ambición del Partido Morena de suceder tres momentos relevantes para la historia de México: la independencia, las reformas liberales del siglo XIX y la Revolución Mexicana.” (Ibíd)

Por último, nobles lectores exigentes, permítanme cinco asuntos esenciales con una coda: 1er. En su mensaje inicial como ganadora de la elección, la académica de izquierda y científica de profesión se comprometió a gobernar para todos los mexicanos: ¿logrará lidiar con un país machista, violento, polarizado e inseguro, que sin embargo confía en esta gran mujer apoyada en ese gran hombre que es AMLO? Solo queda esperar que cumpla esa promesa “y que haya en ella una convicción democrática mínima para empujar su proyecto de país, respetando a las minorías y valorando la pluralidad que compone a la sociedad mexicana.” (elespectador.com, 2024) CSP tendrá que enfrentarse a esto con menos carisma y, sobre todo, “con menos presupuesto, pero con más poder que su antecesor pues Morena no solo arrasó con las gobernaciones: también tiene mayorías en el Congreso.” (Ruiz, 2024) Así, “está por verse qué pasará cuando un país tan machista como México tenga su primer sexenio con presidenta.” (Ibíd) Y PBV, quien recibirá en noviembre el premio de poesía más importante en habla hispana, también en su primer mensaje como la primera colombiana ganadora del premio lírico iberoamericano, dijo: “es difícil ganarse un premio así, estoy muy, muy feliz y muy agradecida con el jurado de todas maneras porque hay muchos nombres posibles en lengua española, tenemos poetas extraordinarios…” (eltiempo.com, 2024)

2º.  Los indicadores macro reflejan que la izquierda mexicana, con su ideología, sigue creando valor para sus compatriotas. En las elecciones mexicanas pasadas, el pueblo ha elegido a la coalición de izquierda liderada por Morena, el partido del presidente AMLO, en cabeza de Sheinbaum, una mujer académica de izquierda, científica de profesión y política ecológica de origen judío. Igualmente, con Bonnett la literatura colombiana no se detiene en su enriquecimiento del género lírico para aportarle a Colombia, Iberoamérica y al mundo; ella dijo que escribe poesía para “saber del milagro de otros”, agregando que: “En clase utilizaba un verso de Miguel Hernández: ‘Porque la pena tizna cuando estalla’. La ruptura de la lógica nos estremece. Muchas veces un poema es una pregunta. He tenido tendencia a decir la verdad sin pararme a pensar que pudiera de pronto molestarle a alguien.” Y sobre la sinceridad de su obra, Piedad apuntó: “Si algo traigo de mi crianza es ese valor ético, jamás he impostado. ¿Usar la literatura para mentir? ¿Para qué? El que engaña es el primero que se engaña”. (Zabalbeascoa, 2019) Lo mismo piensa la presidenta electa acerca de la política, la ciencia y la academia.    

3º. Es evidente que el mandato femenino estará presente en México desde el próximo 1° de octubre, día de posesión de CSP, en el que va a existir una perspectiva de género importante en su sexenio, “pues ella tiene el interés de rescatar a quienes han sido las mujeres en la historia de México y en todos los ámbitos”. Por eso su proyecto bandera conjuga varias generaciones femeninas: “No llego sola, llegamos todas. Con nuestras heroínas que nos dieron patria, con nuestras ancestras, nuestras madres, nuestras hijas y nuestras nietas”. (Sosa, 2024) Por su parte, la primera mujer Colombiana premio de poesía iberoamericana ha dicho que ella seguirá con su producción y lecturas literarias; pero que también trabajará con los ministerios de Educación y Cultura para promover esas actividades en su país.     

4º. Como estamos “ante nuevas realidades. En América Latina, fuera de México, en Ecuador, Perú, Bolivia, Chile, Argentina, Uruguay, Brasil, Panamá, Costa Rica, Honduras, Nicaragua, El Salvador y Haití, mujeres han ejercido la presidencia, varias de ellas elegidas directamente por el voto popular… Para no hablar de los países caribeños angloparlantes que nos dieron ejemplo de ello desde hace muchas décadas, con ilustres jefas de estado como la famosa Eugenia Charles, la primera ministra de Dominica durante 15 años. Solamente Colombia, Venezuela y República Dominicana no han tenido mujeres de presidentas… ¿Será que en Colombia “todavía no es tiempo” para que una mujer sea presidenta? Hay que buscarla, ya que podría generar un ambiente más propicio para la convivencia y el entendimiento. Es la única solución que no hemos ensayado” (Londoño, 2024), sería muy bueno hacerlo para ponernos a tono con el epígrafe garciamarquiano de la dedicatoria.

. A estas inmensas féminas iberoamericanas las une la complicidad de la academia, el amor por la libertad de pensamiento, por las aulas, los más vulnerables “y las letras como una forma de abordar el mundo.” Mientras Piedad “ejerce la poesía como lanza y escudo, como evidencia, como una bandera que ondea entre la fuerza y la melancolía” (Arias, 2024); Claudia ejerce la política como su alma, vida y corazón. Mientras en Piedad “las palabras se vuelven imágenes, pasos insalvables, mezcla de ilusión y desolaciones que atraviesan las paredes de una cocina o de un mundo, para quedarse a vivir en el corazón de los lectores” Ibíd); en Claudia las palabras se vuelven poder explicativo para la solución comunitaria. Ambas son seres humanos dulces, tiernos y valientes que acarician las palabras y las incorporan a la esencia de los sentidos poéticos y políticos: ¡toda mi admiración y respeto a ellas!

En suma, pues, pareciera que Iberoamérica está ávida de mujeres que aboguen por la emergencia del principio femenino en la conducción de la política, la academia, la ciencia y el arte para que, de acuerdo con García Márquez, “nuevos valores dirijan la humanidad. Que sentidos como la imaginación, la intuición, el onirismo y la propia percepción, entren a completar y superar la tarea de la lógica, de la razón y de la planificación. Que la ternura haga el trabajo que durante más de tres milenios masculinos ha realizado la violencia”. (Jiménez, 1995: 40) Ciertamente, a través de esas áreas lideradas por la mujer como poderes del ciudadano, ella nos enseñan a ser comprensivos, tolerantes, solidarios con los otros. Con la mujer llegamos a la poesía y a la política que siempre dan a la vida una segunda oportunidad: orgullo para México la elección histórica de su presidenta electa CSP y orgullo para Colombia el Premio “Nobel de Poesía”, otorgado merecidamente a PBV. Mientras la política por estos días es de Claudia Sheinbaum, la poesía por estos días es de Piedad Bonnett, a quienes este portal felicita y agradece por tanta honestidad al escribir y al hacer política y nunca darse por vencidas; gracias por entregarnos en sus libros y accionar político “la belleza de las palabras, el sentido del amor y del desamor, de los adioses y los abrazos.” Gracias porque en esos lenguajes caminan de la mano la vida y la muerte -sobre todo la vida-, “y cabe todo lo profundo, todo, menos el olvido.”

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16 respuestas a «BONNETT Y SHEINBAUM, ¡INMENSAS!»

  1. No solamente es un gran logro de la mujer, en el país más machista del continente americano; es el logro de una democracia en medio de los enemigos de la verdadera libertad democrática.
    Ojalá logre el triunfo que tanto esperan l@s mexican@s, sobre los grandes quebrantos sociales que padece nuestro hermano país de México.

  2. De gran connotación estos triunfos alcanzados por dos virtuosas y excelsas mujeres, que gracias a la convicción feminista que por años han aclamado, reclamado, luchado y han mostrado con capacidad e inteligencia en los diferentes escenarios, a fin de cerrar brechas de desigualdad y discriminación. Gracias amigo por su reconocimiento y felicitaciones para éstas ilustres damas: BONNETT Y SHEINBAUM, a los cuales también me uno.

  3. Esta columna de mi ilustre compañero y colega Dairo González Quiróz, me hace recordar una recriminación machista en la Región Caribe: «¡Tú eres un gobernao de la mujer!», a lo que respondo: «Orgullosamente gobernado». Éstas dos mujeres del escrito, nos enseñan como se debe gobernar el mundo, por un lado, mejorar las condiciones de los menos favorecidos y discriminados históricamente como son las mujeres, teniendo en cuenta el medio ambiente, al mismo tiempo, cierto romanticismo y poesía, para conseguir y hacer de nuestro planeta, un mejor vividero.

  4. Mujeres que nos llegan de orgullo y son ejemplo a seguir, tanto en la política como en la poesía, así como en cualquier ámbito en las mujeres decidamos participar en equidad de género. Muchas gracias por sus aportes señor Dairo, excelente artículo como siempre.

  5. Me agrada la voz entusiasta con que haces este paralelo. Vale por un reconocimiento a las mujeres que se sobreponen a los marcos asfixiantes de la cultura patriarcal (infortunadamente, aún vigente).

  6. Reconocido el relato y la comparación que hace de estas dos mujeres dentro de dos contextos aparente mente diferentes. La lucha por la igualdad social y la justicia en estas sociedades tan machistas quienes la harán mejor entre hombres y mujeres,solo lo harán quienes pongan los intereses comunes por encima de los intereses privados,nada fácil en unas sociedades sometidas y dominadas por corporaciones .

  7. Cabe en la Historia con gran Orgullo ubicar en el podium de dos Grandes Heroínas que nos Referencian con su legado de virtudes para emular su Entereza para una sociedad en proceso de transformación.

  8. Espero que la Presidente Sheinbaum logre sortear con éxito todas las situaciones embarazosas; se le presentarán durante su mandato en forma recurrente.
    No es fácil la labor que enfrentará; mis deseos que salga avante a tan difícil reto que enfrentará.

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